La tragedia de una madre

Post escrito el 5.11.2006 por FZ madrdHelena

Carta publicada en elperiodico.es, 3.11.2006 (A continuación he escrito una carta a esta madre llamada Carmen Riera)

LA TRAGEDIA DE UNA MADRE
¿Cómo se lo explico?
Carme Riera
Sant Esteve de Palautordera
Tengo tres hijas de 13, 7 y 4 años. Hace tres meses, se quedaron sin padre porque un vehículo se les echó encima causándole la muerte instantánea. Aparte del trauma que les supuso el accidente, ya que las tres iban con él en el coche, es muy duro intentar que entiendan que la persona que le causó la muerte no tendrá ningún tipo de castigo, que seguramente seguirá conduciendo y sus hijos vivirán una vida que para los míos no será la misma. Al leer que el fiscal especialista en tráfico del TSJC reclama juzgados específicos para los delitos viarios me alegro porque veo que hay gente que lucha porque la situación cambie, ya que no nos tenemos que conformar con la indemnización económica.

 

Querida amiga de desgracia:
Me imagino por lo que estás pasando. Si yo con mis años, medio siglo, no logro entender algo parecido a lo que describes tú, ni logro creerme la muerte de mi hija, como unas niñas tan pequeñas lo van a entender.
Aunque, los niños tienen una lógica aplastante y lo ven todo desde una perspectiva más natural. Seguro que entienden como natural que la justicia va años por detrás que la sociedad y qué, lo que nosotros aún nos cuestionamos o no podemos imaginar o creer, porque seguimos creyendo en la justicia, ellas puede que lo vean como una realidad sin más.
Pero no les haga perder la inocencia. Espera a que sean mayores para que se desilusionen o luchen por cambiar este mundo. No les trasmita nuestra desesperanza y piensa que tienes mucha suerte.
Sé que esto no te va a reconfortar, porque si a mí me lo dicen tampoco me lo creo, pero te lo digo desde mi posición de madre sin hijos. Tú tienes 3 hermosas criaturas, que serán tu motor para seguir adelante. Ellas son tu futuro y nuestro futuro. Quizás sean la pieza para que todo esto cambie.
Mi marido y yo pensamos que lo que le pasó a nuestra hija no le debería pasar a nadie, pero puestos a no poder evitarlo, hubiéramos querido que en su lugar estuviera uno de nosotros, que ya habíamos vivido mucho más que lo que ella vivió (20 años)
Tu marido seguro que pensó lo mismo.
El presunto culpable de la muerte de mi hija seguro que está conduciendo, no le retiraron el carnet, hasta que no se produzca el juicio. Ya ha pasado año y medio. De lo que no estoy tan segura es de que no vaya a recibir castigo. No quiero perder la esperanza, quiero seguir pensando que habrá justicia, aunque la condena siempre será menor que para nosotros.

A nosotros nos han condenado de por vida.

 

Esperemos que, efectivamente, el nombramiento de Bartolomé Vargas como Fiscal de Sala coordinador de Seguridad Vial, si el gobierno lo aprueba y la creación de esta fiscalía, implique, modernice y elimine las demoras en las vistas y el castigo de estos casos.

Las muertes por salida de la vía o invasión del carril contrario son en gran mayoría, producidas por algo o alguien, casi siempre, las producen los contrarios, los que normalmente apenas tiene daños y nuestros muertos entrar a formar parte de la estadística, no son considerados víctimas aniquiladas por un arma tan mortífera como una pistola: un coche.

Esperemos que, efectivamente, el nombramiento de Bartolomé Vargas como Fiscal de Sala coordinador de Seguridad Vial, si el gobierno lo aprueba y la creación de esta fiscalía, Las muertes por salida de la vía o invasión del carril contrario son en gran mayoría, producidas por algo o alguien, casi siempre, las producen los contrarios, los que normalmente apenas tiene daños y nuestros muertos entrar a formar parte de la estadística, no son considerados víctimas aniquiladas por un arma tan mortífera como una pistola: .

Ten fuerza para sacar adelante a esas tres criaturas.

Flor Zapata Ruiz, madre de Helena.

Acerca de Flor Zapata Ruiz

Ahora soy una madre sin hijos. Mi única hija murió por un conductor con alcohol en abril de 2005. Desde entonces escribo para concienciar, especialmente a los jóvenes, sobre los peligros de una conducción no responsable.
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