Sí, este blog es para la concienciación sobre los siniestros de tráfico y en pro de la Seguridad Vial. No os habéis confundido. Pero ese título, «hasta que la muerte nos separe», más ligado a la violencia de género que al lema de este blog, hoy en día, está ligado, también, a los siniestros de tráfico.
He estado unos días de vacaciones (yo les llamo vacaciones a aquellos días en los que no puedo escribir en el ordenador), y he acumulado noticias para, por desgracia, escribir en el blog sobre diversos temas relacionados con la seguridad vial. Y de entre esos recortes de prensa acumulados en estos día (La seguridad vial al taller, Detenido un camionero tras un choque cuando sextuplicaba la tasa de alcohol, Tipos (psicológicos) al volante…) tenía uno que me llamó poderosamente la atención y que me dio el título de este post: «Pega una paliza a su mujer y después se tira por la ventana» El correo/ Ciudadanos/ 11.08.15.
Sí, sí, sigo hablando de seguridad vial. Ese último título, totalmente de violencia machista, tiene también un trasfondo relacionado con la seguridad vial. El hombre que propinó esa paliza y terminó tirándose por la ventana, no tenía denuncias sobre malos tratos y sólo al final de la noticia podemos encontrar el motivo de esta actuación: parece ser que estaba deprimido. El matrimonio había pasado por malos momentos desde que su hijo había fallecido en accidente de moto. «Cuando la muerte entra por la puerta, el amor sale por la ventana».
Pero, aunque esta noticia fue el origen de este post, ayer, nuevamente, me venía a la mente su título cuando escuché la noticia de que el caso de una mujer, atropellada, podría tratarse de un tema de violencia de género, cuando su ex marido intentaba suicidarse arrojándose al tren. En lo primero que pensé: matar con un coche es muy barato.
Se sigue investigando la muerte de esta mujer, pero podría confirmarse que es un nuevo caso de violencia de género, en este caso, transformado en un siniestro de tráfico.
Y la DGT sigue insistiendo en los objetos más caros. No son objetos, son personas.
Personas que quitan la vida a otras personas, por diversos motivos: velocidad, drogas, distracciones, mala educación, violencia, puntos negros. Siniestros que dejan daños colaterales como las relaciones familiares rotas por la pérdida de un hijo, o enfermedades.
Esta semana conocía la muerte de Rosario (madre de Mar, muerta por la acción de un conductor borracho, como mi hija), por un tumor. Quién sabe si como consecuencia del shock y el dolor producido por la pérdida de una hija. Descansa en paz, compañera.
¿Pensáis que no elegido bien el título?
Hasta que la muerte nos separe de este mundo, sufriremos por los daños colaterales consecuencia de los siniestros de tráfico
Flor Zapata Ruiz, madre de Helena, que murió por un conductor borracho.
www.quieroconducirquierovivir.com
Una lástima que sucedan tantas desgracias de este tipo, más cuando se podrían haber evitado haciendo un uso responsable de los vehículos y respetando las normas de seguridad vial.