(Post escrito el 13 de febrero de 2008 por FZ madredHelena)
(Post escrito el 13 de febrero de 2008 por FZ madredHelena)
Hoy había comenzado el día escribiendo un artículo sobre San Valentín. Incluso había metido una imagen de la reseña en la agenda de Helena, llena de corazones, sobre este día.
Quería comenzar el día con algo agradable. Quizás es que presentía que el día no terminaría bien como para poder escribir sobre San Valentín. Y así ha sido.
Ésta ha sido nuestra 4ª convocatoria con la Justicia y todavía habrá una 5ª.
Durante estos 3 años he intentado y sigo intentando ser respetuosa con la justicia y dejarles trabajar. Hasta que no haya una sentencia y a pesar de que en el juicio existe audiencia pública, no traeré hasta aquí las notas que diversas personas están tomando de la misma.
Pero hoy me voy a la cama con una frase. Una frase que me ha impactado, que me ha hecho sufrir, aunque no más que otras que he podido escuchar en la sesión de hoy, pero ésta es especial por lo que conlleva.
Ha sido pronunciada por una testigo: «¡El coche voló!» «Jamás había visto volar un coche por los aires como ese».
A los padres siempre nos dicen: Murió en el acto, no sufrió, no se entero.
Yo me pregunto, esos segundos que mi hija estuvo volando dentro de un coche del que había desaparecido el portamaletas por el impacto recibido, ¿Qué sentiría mi hija? ¿Quién me asegura que no se enteró, qué no sufrió?
Voló, voló, voló….
Flor Zapata Ruiz, madre de Helena, que murió por un conductor borracho.
