Este fin de semana, recordaba este episodio, cuando veía esta foto:

Este fin de semana, recordaba, también, el optimismo de las cifras facilitadas por los organismos oficiales: «La cifras más bajas de muertes en carretera desde el año 1965. El número de muerto en febrero es de 135«.
Este fin de semana, 18 muertos en 12 mal llamados accidentes. (Después la DGT ha informado de 21 muertos. Peor todavía)
También recordaba mi cuento de Navidad, de este año «Te estás durmiendo«, cuando me enteraba que, probablemente, esta fue la causa de uno de ellos, en Castellví de Rosanes, y que ha producido 5 muertos.
Este fin de semana ha sido uno de los más sangrientos. Y no por el número de víctimas, que habrá habido otros con más, sino porque en cada mal llamado accidente, las víctimas, eran muchas.
Los árboles se han multiplicado en nuestras carreteras. Pero, ahora, tienen formas diversas y no producen oxigeno ni bienestar con su observación. Ahora, los árboles son de hormigón, de acero, cuchillos… Los árboles que han plantado los hombres, dicen, que para salvar vidas, para quitar miedos… ¿Quita qué?
Flor Zapata Ruiz, madre de Helena.