Esta carta fue escrita en Marzo de 2007. Después de 2 años, seguimos sin Ley sobre el alcohol. Los jóvenes se siguen reuniendo, a veces, única y exclusivamente para beber y los mal llamados accidentes de tráfico siguen plagados de siniestros en los que el alcohol está presente.
De vez en cuando, siguen apareciendo personas que tratan de imponer algo de cordura en este tema, pero sin grandes resultados y el alcohol sigue sembrado destrucción y muerte.
Foros – EL PAÍS _ Cartas al director _ Sobre el artículo “Con alcohol y sin ley”
Publicado por: moderador el 07/03/2007 – 21:54
Sobre el artículo “Con alcohol y sin ley”
El País de fecha 6 de publica en la sección Tribuna, “Con alcohol y sin ley”, artículo de los profesores Joan Carles March y María Ángeles Prieto, profesores de la Escuela Andaluza de Salud Pública.
En este artículo, además de ser un alegato por la educación para la salud, posee abundantes datos sobre el consumo de alcohol entre los jóvenes, según una encuesta nacional de salud y los daños que el alcohol provoca en el cerebro de los adolescentes.
Para muchas personas no son necesarios tales datos para estar convencidos de los daños que produce el mal uso del alcohol, tanto en adultos como en jóvenes y no sólo a aquellas personas que lo consumen, sino incluso en “el bebedor pasivo”.
Perdí a mi única hija por la conducción irresponsable de una persona bajo los efectos del alcohol.
Yo misma escribí a la ministra de sanidad, pidiéndole que hicieran algo por este tema, puesto que es un tema de salud pública.
Pero una vez más han primado los interese políticos y económicos sobre la salud.
Como la propia ministra de sanidad decía en la entrevista publicada también por este diario el pasado 22 de febrero, “El 90 % de los que han hablado de la ley no la había leído”. También decía “espero que este tema se convierta en los próximos meses en una inquietud social”.
Eso es lo que a mí también me gustaría, porque si no hacemos algo, esta sociedad terminará completamente mermada por las muertes de los jóvenes en carreteras o como consecuencia de la ingesta de alcohol en edad tan temprana, una droga más aunque asuste menos que las otras.
Y no me digan que no quieren ser los más sanos del cementerio. Mi hija amaba la vida y por supuesto no tenía ningún interés en morir. Ahora es la más sana del cementerio.
Flor Zapata Ruiz, Alcobendas (Madrid)
Publicado miércoles, 14 de marzo de 2007 11:56 por FZ_madredHelena
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