Hoy 7 de Julio, y después de varios años de no celebrarse, ha tenido lugar el 8º Triatlón de montaña de Valsaín (Segovia). Este año, convertido en “Memorial Lola Velayos”.
Sí, una prueba deportiva dedicada a la memoria de Lola Velayos, hija de Oliva Rodriguez Gilabert, presidenta de la asociación “Lola Velayos, no más vidas rotas en la carretera”. Y además de ser una prueba dura para todos los participantes, ha sido un ejemplo de colaboración, cooperación y entusiasmo de todo un pueblo.
Oliva ha sabido reunirse de amigos, familiares y vecinos que han trabajado en la preparación, colaboración y desarrollo de esta prueba.
Pero para los que no conocen la historia de Lola Velayos, viajemos a febrero de 2012 y leed mi post “El carril Bus VAO. Una ratonera mortal” Fue a través de este post como conocí a Oliva.
Lola perdió la vida en la A-VI, Carretera de la Coruña. Una desafortunada avería les dejó parados en este carril, bastante peligroso por su tráfico, y un autobús, cuyo conductor estaba en lo que no tenía que estar, arrasó el coche en el que viajaba Lola.
Su madre lo tuvo muy claro. A Lola ya no la recuperaría, pero tenía que hacer lo posible por concienciar sobre los mal llamados accidentes de tráfico para evitar otras muertes. Una nueva madre que comenzaba a luchar.
La asociación Lola Velayos ha comenzado a andar no hace mucho, pero a buen ritmo y con buenos resultados, prueba de ello ha sido el día de hoy.
Además de estar apoyando este evento deportivo, ha habido un parque infantil de seguridad vial, con cuentacuentos, y una paella solidaria, a pesar del calor, de la que hemos disfrutados numerosas personas.
Ha sido todo un ejemplo de colaboración, e interés.
Siento no tener aquí los nombres de los ganadores, aunque sí alguna que otra foto.
(Ganadores y ganadoras que han tenido que demostrar, también, sus dotes de equilibrio en el pódium)
Me gustaría agradecer a esos deportistas lo que han hecho por una madre y la seguridad vial, y espero que esta no haya sido una prueba más en la que han participado, sino una prueba que les haya llegado al corazón. Espero que ellos ahora expandan el mensaje: todos debemos estar implicados y comprometidos con la seguridad vial y el descenso de víctimas de accidentes de tráfico. Porque cada día se produce una nueva madre sin hijos, por culpa de un siniestro vial, o muchos heridos por accidentes de tráfico que les cambia su vida.
Gracias, Oliva, por invitarme y darme la oportunidad de participar (dando agua en un punto de avituallamiento ¡qué difícil! Pero sobre todo, por poder admirar como en un lugar pequeño todavía existe la solidaridad y la cercanía de unos vecinos.
Y para terminar el día, he tenido que pasar por donde mataron a mi hija. Y para compensar el mal trago, en el baño de casa nos esperaba una mariposa. ¡Qué cosas!
Ánimo Oliva, lo estás haciendo muy bien. Y Lola estará muy orgullosa.
Flor Zapata Ruiz, madre de Helena, muerta por la acción de un conductor con alcohol.
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